Es una escultura renacentista del siglo XVI, pertenenciente a la etapa de Cinquecento en Italia. Es la figura central de la tumba del Papa Julio II, que se encuentra en la iglesia de San Pedro in Víncoli, en Roma. Fue realizada en 1515 por Miguel Ángel Buonarotti, escultor florentino. Está realizada en mármol blanco de Carrara y se trata de una escultura exenta o de bulto redondo, de cuerpo entero y sedente, auque dada la configuración del sepulcro (tipo fachada adherido al muro), la obra sólo puede ser contemplada frontalmente.El modelado es perfecto; Miguel Angel ha tratado el mármol, su material predilecto, como si fuera la más dócil de las materias (arcilla, plastilina, etc.). El estudio anatómico es de un naturalismo asombroso (los brazos del profeta exhiben la fortaleza y tensión de un atleta, a pesar de la edad madura del mismo). El mármol blanco pulido deja resbalar la luz. Las ropas caen en pliegues de gran naturalismo, donde los contrastes de luces y sombras que provocan las profundas oquedades en el mármol, otorgan a la figura su rotundo volumen. Podemos ver en esta escultura las características del estilo renacentista: búsqueda de la belleza ideal, acentuado naturalismo, interés por la figura humana y su anatomía (el cuerpo como expresión del ideal humanista de virtud y fortaleza y no como depósito del pecado, como era percibido en la Edad Media), tal como corresponde a la cultura antropocéntrica del periodo humanista; al igual que en la Antigüedad clásica, se crean: composiciones equilibradas, armoniosas, movimiento en potencia, perfección técnica. Todas estas características, no obstante, han de ser matizadas según la naturaleza de la obra y el autor del que se trate, ya que Miguel Ángel es, en sí mismo, un caso excepcional por la calidad de sus obras y la evolución estilística que ofrece en su larga vida. Para mi Miguel Ángel es un gran escultor, de todos los tiempos por que dejó su legado, con grandes esculturas como esta, de formas hermosas y muy bien esculpida.
Es una escultura renacentista del siglo XVI, pertenenciente a la etapa de Cinquecento en Italia. Es la figura central de la tumba del Papa Julio II, que se encuentra en la iglesia de San Pedro in Víncoli, en Roma. Fue realizada en 1515 por Miguel Ángel Buonarotti, escultor florentino.
ResponderEliminarEstá realizada en mármol blanco de Carrara y se trata de una escultura exenta o de bulto redondo, de cuerpo entero y sedente, auque dada la configuración del sepulcro (tipo fachada adherido al muro), la obra sólo puede ser contemplada frontalmente.El modelado es perfecto; Miguel Angel ha tratado el mármol, su material predilecto, como si fuera la más dócil de las materias (arcilla, plastilina, etc.). El estudio anatómico es de un naturalismo asombroso (los brazos del profeta exhiben la fortaleza y tensión de un atleta, a pesar de la edad madura del mismo). El mármol blanco pulido deja resbalar la luz. Las ropas caen en pliegues de gran naturalismo, donde los contrastes de luces y sombras que provocan las profundas oquedades en el mármol, otorgan a la figura su rotundo volumen. Podemos ver en esta escultura las características del estilo renacentista: búsqueda de la belleza ideal, acentuado naturalismo, interés por la figura humana y su anatomía (el cuerpo como expresión del ideal humanista de virtud y fortaleza y no como depósito del pecado, como era percibido en la Edad Media), tal como corresponde a la cultura antropocéntrica del periodo humanista; al igual que en la Antigüedad clásica, se crean: composiciones equilibradas, armoniosas, movimiento en potencia, perfección técnica. Todas estas características, no obstante, han de ser matizadas según la naturaleza de la obra y el autor del que se trate, ya que Miguel Ángel es, en sí mismo, un caso excepcional por la calidad de sus obras y la evolución estilística que ofrece en su larga vida. Para mi Miguel Ángel es un gran escultor, de todos los tiempos por que dejó su legado, con grandes esculturas como esta, de formas hermosas y muy bien esculpida.