Nos encontramos ante una estatua de bulto redondo, de cuerpo entero en actitud de pie del emperador Octavio Augusto, como dirigiéndose al público o arengando a sus tropas, al tener la mano derecha levantada. Está realizada en mármol y mide unos dos metros de altura. Parece que es una copia o duplicado en mármol, realizada una vez fallecido el emperador en el 14 d.C., de un original en bronce realizado en torno al año 19 o 20 a.C. Esta escultura conservada en el Museo Vaticano (Braccio Nuovo) es una reproducción encargada por su esposa Livia cuando enviudó, y fue encontrada en 1863 en las ruinas de la Villa llamada Ad Gallims Albas, en el lugar de Prima Porta, en un lugar suburbano cerca de Roma, junto a la Vía Flaminia, donde se retiró Livia tras la muerte de su esposo.
Las superficies parecen lisas y pulidas aunque en su armadura se aprecian relieves de mucho trabajo. En la obra aún se pueden observar restos colores vivos como dorados, púrpura, azul y otros colores, con lo que la obra estuvo policromada. En la obra se aprecia algo de frontalidad y su actitud es reposada y serena, pero al ladear la cabeza y la posición de contraposto. Es un gran diseño, en el tallado y las formas, son geniales las proporciones.
Nos encontramos ante una estatua de bulto redondo, de cuerpo entero en actitud de pie del emperador Octavio Augusto, como dirigiéndose al público o arengando a sus tropas, al tener la mano derecha levantada. Está realizada en mármol y mide unos dos metros de altura. Parece que es una copia o duplicado en mármol, realizada una vez fallecido el emperador en el 14 d.C., de un original en bronce realizado en torno al año 19 o 20 a.C. Esta escultura conservada en el Museo Vaticano (Braccio Nuovo) es una reproducción encargada por su esposa Livia cuando enviudó, y fue encontrada en 1863 en las ruinas de la Villa llamada Ad Gallims Albas, en el lugar de Prima Porta, en un lugar suburbano cerca de Roma, junto a la Vía Flaminia, donde se retiró Livia tras la muerte de su esposo.
ResponderEliminarLas superficies parecen lisas y pulidas aunque en su armadura se aprecian relieves de mucho trabajo. En la obra aún se pueden observar restos colores vivos como dorados, púrpura, azul y otros colores, con lo que la obra estuvo policromada. En la obra se aprecia algo de frontalidad y su actitud es reposada y serena, pero al ladear la cabeza y la posición de contraposto. Es un gran diseño, en el tallado y las formas, son geniales las proporciones.